Los donostiarras hicieron su trabajo en casa echando al Mallorca y los hispalenses pudieron conquistar Mendizorroza ante un combativo Alavés de Segunda.
Seguramente era lo esperado en términos generales y así acabó ocurriendo. Los octavos de final de la Copa del Rey comienzan con las victorias de la Real Sociedad y el Sevilla para pasar a cuartos de final.
Los donostiarras tenían la ventaja de jugar en casa, ante un Mallorca que miraba de reojo a LaLiga Santander y su duelo clave del próximo viernes. Eso les permitió hacer bueno el tempranero gol de Robert Navarro e imponerse por 1-0 para clasificarse a cuartos.
Por su parte, en el segundo partido del día sí que había más dudas de qué es lo que podía ocurrir, con un Deportivo Alavés que soñaba con cargarse al segundo equipo de Primera División consecutivo, y un Sevilla muy necesitado que finalmente hizo buena su superioridad para ganar por 0-1.
La Real Sociedad supo jugar con todo lo que tenía a su favor para lograr el pase a cuartos de la Copa.
Se adelantó muy pronto, en el minuto 5 de juego, y desde ahí dominó con el balón como suelen hacer los de Imanol Alguacil en su estadio. Es cierto que quizás hubiera sido mejor sentenciar antes, pero también hay que ver que este conjunto donostiarra está muy acostumbrado a dejar su puerta imbatida en casa. Con el de ayer son ya cinco duelos de los nueve últimos disputados en el Reale Arena sin encajar.
Además, enfrente estaba un Mallorca a medio gas. Javier Aguirre decidió competir en este torneo con los suplentes, seguramente sabedor que lo importante de esta semana se juega el viernes ante el Celta de Vigo. De hecho, pese a ir por detrás en el marcador el mexicano ni siquiera hizo vestirse de corto a Vedat Muriqi, su máximo goleador de la temporada con nueve tantos.
De esta manera, sin sufrir tampoco en exceso, el equipo de Alguacil continúa en una Copa en la que se mete por tercera vez en las últimas cuatro ediciones en cuartos de final. Indudablemente eso demuestra que el nuevo formato le beneficia mucho al cuadro txuri-urdin, que ganó la primera edición con las eliminatorias a partido único y ya se ha metido entre los ocho mejores en dos ocasiones más. Para hacernos una idea, con el sistema anterior, para contabilizar tres presencias de los de San Sebastián en cuartos, hay que remontarse hasta el año 1993.
Colchoneros y verdiblancos, obligados a ganar
Los locales tienen preferencia
El Sevilla logró una victoria que le mete en cuartos de final de la Copa del Rey. Pero la realidad del equipo de Jorge Sampaoli es que necesita ganar o puntuar en los encuentros de LaLiga y que este torneo quizás le sobra desde hace algunas rondas, pues solo supone cansancio y distracción para su plantilla.
Los hispalenses al menos hicieron su trabajo ante uno de los equipos de Segunda División que todavía quedaban vivos en la competición. Y no era sencillo, ya que el Alavés en Mendizorroza está muy fuerte esta campaña, algo que precisamente pudo sentir el Real Valladolid en sus carnes en la ronda anterior.
Pero un tanto de Ivan Rakitic en el minuto 48 fue suficiente para derribar el muro vasco y adjudicarse una victoria que, entre todas las competiciones, supone la tercera en sus cuatro partidos más recientes.
Ahora solo veremos si este triunfo ha sido bueno para los de Nervión si hacen lo propio el fin de semana en su duelo en casa ante el Cádiz, otro de los equipos que ahora mismo ocupan puestos de descenso en LaLiga. Si los hispalenses vencen, entonces el subidón moral de su victoria en Vitoria habría sido importante y lógico. Pero si empatan o pierden, se echarán en falta parte de las fuerzas gastadas en una Copa que, verdaderamente, parece que no pinta mucho para el Sevilla.
Eso sí, en la trayectoria del equipo andaluz podemos comprobar que sigue siendo uno de los equipos fieles en este torneo. En este siglo ha alcanzado cuatro finales, ganando dos de ellas, y cinco semifinales más, la última en el 2021. Ahora regresa a unos cuartos de final que ha pisado en cinco de sus ocho campañas anteriores a esta, demostrando que casi siempre presenta batalla por el título.
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