La escudería italiana ha dominado sin discusión los test previos a la temporada y aspiran a conseguir el tercer título mundial por su gran ritmo sobre la pista.
Se antoja muy complicado que alguien pueda hacer frente a Ducati la próxima temporada de MotoGP. Los italianos Francesco Bagnaia y Enea Bastianini tendrán en su posesión la moto más veloz de toda la parrilla para disputarse el campeonato mundial de pilotos y constructores.
La situación no puede ser más favorable para la fábrica de Bolonia. Han dominado todos los test de forma incontestable. Bagnaia acabó en primera posición en la última jornada celebrada en Portimao, logrando pulverizar el récord del circuito y metiéndole tres décimas a Johann Zarco, del equipo satélite.
En este inicio de pretemporada, se antoja muy complicado que alguien pueda hacer frente a las dos Ducati. La única amenaza, respecto a tiempos, ha sido la de Fabio Quartararo con su Yamaha. Sin embargo, el francés aún está muy lejos de los tiempos que está marcando el vigente campeón del mundo.
Está claro que tienen la sartén por el mango, aunque tendrán que demostrarlo sobre la pista. El transcurso de las carreras puede variar mucho, pero el ritmo para ganar ya lo tienen que es lo más importante. Han conseguido mejorar algo que ya era insuperable. La Desmosedici con la que ‘Pecco’ conquistó el título era una máquina perfecta y parece que la de 2023 puede ser mejor. Una situación que reduce las opciones del resto de competidores.
GasGas llega con grandes aspiraciones
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El vigente ostentador del título de pilotos llega a esta temporada con todos los focos puestos en él. Acapara el favoritismo para volver a conquistar el mundial. Su condición de campeón y la moto tan rápida son los principales factores para pensar que tendrá menos dificultades que en el 2022.
El curso pasado completó un tramo final casi impoluto, recortándole más de cien puntos a Quartararo para darle el segundo título a Ducati desde 2007. Un año en el que lo consiguió Casey Stoner.
El italiano, que afronta su tercer año en la marca principal, consiguió siete triunfos la temporada pasada y aspira a poder igualar e incluso mejorar esos números la presente edición. A priori, los principales rivales pueden ser el propio Quartararo, su compañero de equipo y al que nunca hay que descartar es a un Marc Márquez, que aspira a conseguir su séptima corona. Hasta el propio piloto confirmó que esta moto le gusta más que la del año pasado.
‘La Bestia’ llega a la casa principal después de un año en Gresini Racing Team, donde ha arrasado. Consiguió cuatro victorias en el equipo satélite y un tercer puesto en la clasificación general que le han llevado a tener este asiento, junto a Bagnaia.
Lo que es seguro es que dará guerra, porque se trata de un piloto generacional e insaciable. A sus 25 años, tiene la posibilidad de pelear por ser el primer piloto de la escudería, aunque no será nada sencillo después de la exhibición de su compañero de box.
El de Rimini se caracteriza por ser un alma libre y que puede ser muy combativo sobre el asfalto. Promete dar guerra en una temporada que parece ser que el título puede decidirse entre los dos hombres de Ducati.
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