El club italiano ha sumado tan solo un punto entre las dos primeras jornadas de la Champions y ahora recibe a la gran revelación del inicio del torneo, vencedor ante el Madrid y el Shakhtar.
El Inter de Milán no encajó bien el regreso a la Serie A tras el parón internacional, derrotado por 3-1 en el campo de la Lazio pese a que Ivan Perisic abrió el marcador con un penalti a los 12 minutos de partido. El decepcionante resultado en Roma no supone el mejor refuerzo anímico para afrontar ahora la tercera jornada de la Champions League, a la que acude con un solo punto tras el 0-1 en casa ante el Real Madrid y el posterior empate sin goles en su visita al Shakhtar Donetsk.
La lógica diría que su cita de este martes es la más sencilla de toda la fase de grupos, ya que le toca jugar en su estadio frente al Sheriff Tiraspol, club debutante en la Champions. Sin embargo, el conjunto moldavo ya sorprendió cuando se estrenó con el favorable 2-0 ante el Shakhtar y luego dio la campanada en el Santiago Bernabéu, donde se impuso por 1-2 para situarse como líder en solitario.
Ahora el Sheriff ya no puede jugar la baza de la sorpresa, aunque su racha de 19 partidos consecutivos sin perder con un registro de 16 victorias y tres empates demuestra que su éxito no se debe a hechos aislados. Resulta llamativa su efectividad ofensiva por las bandas con Adama Traoré (no confundir con el español del Wolverhampton) y el capitán Frank Castañeda, quienes suman entre ambos 13 goles y 12 asistencias en lo que va de curso. Además, el colombiano tiene por detrás al brasileño Cristiano, con ocho pases de gol en su haber entre los que se incluyen las asistencias en tres de los cuatro tantos de su equipo en la Champions.
