La franquicia de Boston domina con mano de hierro la Conferencia Este, tiene los mejores números de la liga y es favorita indiscutible al anillo.
Los Boston Celtics son los grandes protagonistas de esta temporada regular de la NBA, ya que son líderes en solitario de la Conferencia Este y tienen un colchón de ocho victorias respecto a su principal perseguidor. Los números de la franquicia son impresionantes, algo que le coloca como favorita indiscutible para conquistar el anillo.
Por un lado, merece la pena destacar que los Celtics (45-12) tienen ocho triunfos de ventaja respecto a los Cleveland Cavaliers (37-19), algo que demuestra su poderío en el Este. Los Milwaukee Bucks (37-21), los Philadelphia 76ers (33-24) o los Miami Heat (32-25) llegaban como alternativas en por esta parte del cuadro, pero han sido incapaces de mantener una racha similar.
Esta diferencia cobra más importancia al comprar la situación con la Conferencia Oeste, donde los seis primeros clasificados están enmarcados en un margen de tan solo seis victorias de distancia. Además, los Celtics tienen cinco triunfos más que los Oklahoma City Thunder (40-17) o los Minnesota Timberwolves (40-17).
Una gran parte del mérito de los Celtics tiene que ver con sus números en el TD Garden, donde mantienen un parcial de 26 victorias y tres derrotas. Esto les coloca como el mejor local de esta temporada regular de la NBA con dos triunfos de colchón respecto a los Denver Nuggets (22-5).
Además, su parcial de 19 victorias y nueve derrotas a domicilio les aporta otro valor diferencial, aunque en este caso los datos son muy similares a los obtenidos por los Cavaliers (18-9) o los Wolves (20-11). Esta solvencia para ganar partidos en casa y competir a domicilio es un valor diferencial a la hora de presentarse como favoritos al anillo.
Por otro lado, no podemos pasar por alto que los Celtics también cuentan con la mejor diferencia de puntos de la NBA. La franquicia de Boston es la cuarta más anotadora de la Conferencia Este y la tercera mejor a nivel defensivo, algo que se traduce en una plantilla muy completa.
De hecho, ninguno de sus jugadores aparece en los Top-5 de estadísticas del curso en cuanto a puntos, rebotes, asistencias, bloqueos, triples o robos. Sin embargo, esta situación convierte a los Celtics en un equipo todavía más peligroso, ya que no depende de nombres concretos y podría solventar cualquier lesión con rotaciones de primer nivel.
La barrera de las 60 victorias en la temporada regular es el objetivo prioritario de los Celtics para las próximas semanas, especialmente cuando se han asegurado el liderato del Este. Este dato sería simbólico, pero supondría su campaña 14 de la historia superando esta cifra.
La franquicia de Boston alcanzó las Finales de la NBA en ocho de estas 13 ocasiones y se quedó sin anillo en dos de ellas. Esto se traduce en una probabilidad de éxito altísima para un equipo que también tendría la ventaja del factor cancha en los playoffs.
La única debilidad tiene que ver también con su mayor fortaleza: un equipo compacto sin una estrella definida. La NBA es la mayor liga del mundo por la capacidad de sus jugadores para resolver cualquier partido, un arma que tienen los Dallas Mavericks con Luka Dooncic, los Thunder con Shai Gilgeous-Alexander o los Milwaukee Bucks con Giannis Antetkounmpo.
Aun así, las series a siete partidos juegan a su favor, debido al desgaste físico que puede producir la acumulación de encuentros en estas figuras. Además, la presencia de Jayson Tatum debería ser diferencial, sobre todo si da un paso hacia adelante en los momentos decisivos de la postemporada.
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