La franquicia de Detroit encadena 18 derrotas consecutivas en una de las peores rachas de resultados de la historia, pero esta tendencia es constante desde hace más de una década.
Esta temporada regular de la NBA 2023/24 está consagrando a los Detroit Pistons como la peor franquicia de la historia, ya que sus números son desastrosos. Los de Monty Williams encadenan 18 derrotas consecutivas y solo han ganado dos de los 21 partidos que han disputado en este curso, algo que empeora todavía más una tendencia que se alarga 15 años.
Sin embargo, no podemos pasar por alto que estamos hablando del sexto equipo más galardonado en la historia de la liga, gracias a sus tres anillos de campeón (1989, 1990 y 2004) y dos derrotas en las Finales de la NBA (1988 y 2005). Eso sí, este potencial ha desaparecido por completo y solo ha alcanzado tres veces los playoffs desde 2009.
Los Pistons han vivido dos etapas de éxitos en la NBA, pero se ven empañadas por la mala dinámica de la franquicia en estos últimos años. Sus tres títulos provienen de estas épocas, donde una plantilla repleta de estrellas fue capaz de frenar a rivales como Los Angeles Lakers, los Chicago Bulls de Michael Jordan o los Portland Trail Blazers.
La primera implosión de los Pistons se produjo a finales de la década de los ’80 y principios de los ’90, cuando la franquicia disputó tres Finales consecutivas para lograr dos anillos. Además, el título de 1898 lo logró tras firmar unos playoffs espectaculares, donde solo encajó dos derrotas en todas las series.
Este potencial se disipó con rapidez, pero una década más tarde volverían a lo más alto tras reformar por completo su proyecto deportiva. El baloncesto fue injusto con Detroit en esa ocasión, debido a que solo levantó un trofeo y alcanzó unas Finales en seis intentos.
Las otras cuatro veces se eliminaron en las Finales de Conferencia, al mismo tiempo que los dos anillos que no consiguieron terminaron decidiéndose siempre en el séptimo partido de la serie. Esta mala suerte rompió al equipo por completo en 2009 y desde entonces vaga sin rumbo por la Conferencia Este.
Las últimas 15 campañas han estado marcadas por un desastre tras otro, debido a que los Pistons solo han alcanzado los playoffs en tres ocasiones para caer eliminados en la primera ronda. Además, todos estos cruces se resolvieron sin un solo triunfo por parte de los de Detroit, que han perdido por completo su esencia competitiva.
Sus datos de victorias han ido descendiendo con el paso de las temporadas y han llegado a su peor expresión en esta temporada regular, al mismo tiempo que no parece cercana una reacción por parte de la plantilla. La planificación es mala, los entrenadores no dan con la tecla y los jugadores no creen en ningún objetivo a medio plazo.
Además, las ideas de la directiva no han ayudado, sobre todo después de apostar por el tanking para tener mejores elecciones en el Draft. Esta estrategia se basa en perder partidos y quedar relegado en la zona baja de la tabla cuando no hay opciones de pelear por un hueco en la postemporada, pero los sorteos tampoco ayudaron a los Pistons en esa ocasión.
El primer objetivo de los Pistons es ponerle fin a una sangría de 18 derrotas consecutivas, que le acercan a la peor racha de resultados de la historia de la NBA. La palma se la llevan los Philadelphia 76ers con 28 tropiezos consecutivos, pero son el sexto peor registro.
El otro es olvidar este curso, donde no tienen posibilidades de acceder a los playoffs pese a todos los meses que quedan por delante. La próxima campaña deben mantener su decidida apuesta por un equipo joven y un entrenador que necesita ganar experiencia, al mismo tiempo que retiene talento y realiza mejores fichajes en el Draft.
Ingreso mínimo de 5€ para los créditos de apuesta. Las ganancias no incluyen el importe de los créditos de apuesta. Se aplican condiciones, límites de tiempo y exclusiones. Ingreso mínimo de 50€ para las fichas doradas. Se aplican premios máximos, restricciones de juego, límites de tiempo y condiciones.