Serio peligro en Miami

Después de la sorpresa de verse superados por los Hawks, ahora los Heat se juegan el pase a los playoffs ante unos Bulls supervivientes en Toronto e invictos ante la franquicia de Florida.

El azar ha querido que la temporada de los Miami Heat acabe exactamente como empezó, con una derrota en casa ante los Chicago Bulls. Casi seis meses después de aquel 108-116 con 28 puntos de DeMar DeRozan durante la segunda mitad del encuentro, ambos equipos vuelven a verse las caras en el partido decisivo del play-in del Este con sensaciones opuestas.

Los locales deben sacudirse las dudas y los fantasmas de su reciente derrota ante los Atlanta Hawks, mientras que los de Chicago salieron muy reforzados anímicamente por su remontada en Toronto y parecen tenerle tomada la medida a su próximo rival. 

Los Heat necesitan el partido opuesto

Nada más después de caer por 105-116 en el primer partido del play-in ante los Hawks, Jimmy Butler declaró: “Venid el viernes, tenemos que jugar exactamente lo contrario a lo que hemos jugado esta noche”. La franquicia de Miami afrontaba ese encuentro con cierta confianza porque venía de ganar ocho de sus diez últimos partidos en casa, incluyendo sus dos citas ante los propios Hawks, pero poco antes del intermedio ya perdía por 39-63.

Aunque los de Erik Spoelstra lograron reaccionar, reduciendo su desventaja a tan solo cinco puntos mediado el tercer cuarto, los Hawks volvieron a recuperar el control para acabar adjudicándose un triunfo que los conduce directamente a los playoffs como rivales de los Boston Celtics.

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Esperanza en los Bulls

La franquicia de Chicago había firmado muy buenos registros a domicilio durante el tramo final de la temporada regular, lo que le daba cierta confianza para su visita a los Toronto Raptors, pero el horizonte se veía muy negro cuando en el tercer cuarto del duelo inicial del play-in perdía por 66-47.

Fue entonces cuando Zach LaVine acudió al rescate, capaz de anotar 30 puntos a partir de ese momento para conducir a los suyos a una remontada que les permitió ganar por 105-109 y seguir en la pelea por los playoffs. “Nos ha dado vida y nos ha dado esperanza”, reconocía el entrenador Billy Donovan al término del encuentro en territorio canadiense.

El otro aspecto reconfortante para la franquicia de Chicago es que se trata de una de las dos de la Conferencia Este que se ha mantenido invicta ante los Heat en la temporada regular. Al citado triunfo inicial por 108-116 con un gran DeRozan en la segunda mitad le siguió el 103-113 del 20 de diciembre también en el Kaseya Center (todavía conocido por FTX Arena por entonces), con Nikola Vucevic como protagonista gracias a sus 29 puntos y 12 rebotes.

El duelo más reciente se produjo hace tan solo un mes en el United Center y los Bulls ganaron por 113-99 en un duelo en el que los Heat, al igual que les sucedió esta semana contra los Hawks, se vieron demasiado mermados por una débil primera parte. Ahora el equipo que gane en Miami se convertirá en el rival de los Milwaukee Bucks durante la ronda inicial de los playoffs.

bet365 News Team

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